Educar a nuestros hijos en la diversidad; viajar por todo el planeta, es la mejor manera de educar en el respeto a otras culturas, otras tradiciones, otras religiones, otras comidas… una enseñanza que valorarán y que formará su personalidad. Compaginar la intimidad familiar y al mismo tiempo ampliar el círculo social es muy agradable, en especial con otras familias que viajan en la misma situación, siendo al mismo tiempo grandes compañeros de viaje, de manera que las vacaciones monoparentales se convierten en la manera perfecta de hacer amigos, tanto para los mayores como para los pequeños. Las vacaciones son el momento perfecto para juntos hacer actividades al aire libre. Los viajes monoparentales propician la interacción y el diálogo ya que la ilusión del viaje será la mejor unión para la familia. Y no solo durante el mismo viaje, también antes y después, porque, con un poco de imaginación, se puede construir toda una experiencia global. Desde una escapada de fin de semana a un gran viaje, te ofrecemos los mejores viajes monoparentales, las vacaciones más divertidas con niños. Sería un orgullo contar con vosotros
